Un entrenamiento desde las raíces

21 de marzo de 2009

El imaginario personal, el cuerpo, lo caótico, la improvisación, el sonido propio, la vibración del cuerpo, la emoción y los sentidos, la vulnerabilidad, la disponibilidad...se unen en un espacio para dar rienda suelta a la creatividad y a la expresión.
Actores, bailarines, músicos, pintores y todo artista, se basan en sus propias experiencias y en el conocimiento de sí mismos y del mundo exterior para plasmar en su arte. Porque cada quien se identifica o se vale de alguno de los distintos modos de expresión en el arte, el dibujo, la pintura, la escritura, la música, el movimiento. A través de la exploración de cada uno de ellos, tanto conocidos como desconocidos para uno mismo, se pueden llegar a conquistar nuevos lugares de expresión para enriquecer la propia creatividad, y a la vez fortalecer la propia expresión.

Se necesitan disparadores, habitar espacios aún sin conocer, buscar en lo escondido y en lo periférico, explorar los bordes, sobre-pasar los límites, abrir caminos nuevos, abrir la sensibilidad, y mucha vibración, a lo que me refiero como "vida"
Las raíces, el enraizamiento o "grounding" se plantea como la herramienta principal, que centra este entrenamiento, para asegurarnos de estar en el "aquí y el ahora", en mí, en mi cuerpo y mi voz, en mi respiración, en mi propia capacidad de expresión.
Me interesa romper con esta dicotomía que tanto nos cohibe: lo bueno-lo malo, lo bonito-lo feo, para poder transgredir esos límites y lanzarse al vacío en busca de lo que realmente importa: lo verdadero, lo auténtico, lo sentido.
En toda búsqueda del propio ser, para encontrarnos con nuestra propia creatividad, se plantea lo desestructurante-estructurante, el caos. Es sólo ahí donde uno puede salir del estereotipo, de dejar de repetir una y otra vez cosas aprendidas para dar un salto hacia algo nuevo, encontrando la propia manera de hacer, pensar, sentir, vivir. Salirse de lo que da miedo o ansiedad, de lo conocido o habitual, para conectarse con lo interno y lo propio, romper la barrera y abrir nuevos caminos.
La intención es investigar, investigarse, tener ganas de ir más allá de las posibilidades, atravesar el cansancio o el dolor para reencontrarnos con nuevas posibilidades, transitar las distintas sensaciones para hacernos cargo de nuestro potencial y enfocarlo hacia donde queremos, para encontrarnos con el placer de "estar vivos".






Ana Cuerdo
Directora de Espacio Raíces
Terapeuta psicocorporal Bioenergética